Resumen de lo sucedido en 8 y 9/8/2006

9/8/2006 (copy/paste de un post que hice en Inforrol y en Plataforma Rol, resumen de la apasionante sesión de la noche)
El personaje es una gestalt maga/pícara nivel 1 de los Principados de Lazhaar, que se ha enrolado en una tripulación pirata, a las órdenes del Príncipe Silver. Mientras la pequeña flota de 3 barcos viajaba al Noreste, desde Skairn, en dirección a una misteriosa isla, fueron atacados por los barcos de un Príncipe rival: Ferric Carapétrea y sus Asaltantes de Nubes (en el manual es una mujer quien lidera la flota, pero quiero darle a mi PJ la exclusividad de convertirse en su día en la única capitana pirata de los Principados). Como su personaje no pinta demasiado en combate, hice que el Capitán la surtiese a ella y a su amigo de toda la vida (Comadreja, pícaro 1 humano) con un par de pociones de invisibilidad y fuego de alquimista. Su misión sería infiltrarse en el buque insignia enemigo al amparo de la invisibilidad y buscar su almacén para prender fuego a cualquier cosa inflamable.

Tras tener que evitar a los combatientes de a bordo para evitar delatarse en un choque, consiguió abrirse camino hacia las bodegas del barco. Vertiendo un par de barriles de ron, hizo detonar el fuego de alquimista y pronto el barco se convirtió en un infierno de llamas y humo. Tres piratas descendieron alarmados y se pusieron a intentar controlar las llamas (con poco éxito). Dejé a uno en las escaleras, de forma que tuvo que apuñalarle para poder escapar. Para aquellos entonces, el humo lo llenaba todo, y tuvo un mal momento en el que al tragar una bocanada de aire, sus pulmones se llenaron de pavesas (estuvo varios asaltos consecutivos fallando las TS de Fortaleza). Ayudada por Comadreja, consiguieron salir a bordo, para ver que en el barco en el que ella viajaba, se estaban cortando los garfios de abordaje para dejar sola a la nave en llamas. Corrieron hacia la barandilla entre hombres que aún combatían y se batían en retirada, sólo para que Comadreja se rompiera un tobillo cuando una sección del barco se desmoronó debido a la virulencia de las llamas.

Pese a que su amigo la recomendó que se largara de aquel infierno, la PJ decidió llevarle a rastras agónicamente mientras su barco se preparaba para salir disparado. Un pirata sediento de sangre se cruzó entonces en su camino y la pj se llevó un par de peligrosas cuchilladas (para ser exactos, se quedó a 2 puntos de golpe). Cuando todo parecía perdido, gravemente herida mientras su barco se comenzaba a alejar, un conjuro de sueño envió a su adversario al suelo como un saco de harina. Agónicamente, la PJ recorrió la cubierta y se tiró en plancha sobre la popa del barco en que viajaba, ante la atónita mirada del resto de la tripulación. Con el peso muerto de su compañero aún a las espaldas, escuchó una tremenda deflagración: el barco enemigo siendo reducido a astillas y hundiéndose en el mar para no volver a navegarlo jamás. Ese momento eligió la PJ para desmayarse.